martes, septiembre 06, 2005

El Conocimiento Virtual de un Sueño

Todo comenzó como un juego de palabras en el mundo virtual, fue indirectamente. Un lindo e inocente gesto que me acerco a ti. El sueño fue no hacerse ninguna idea, incluso pensé nervioso en el juego nuevo de conocer, descubrir, sin saber que sucedería. Ese gesto virtual de un conocido para ti, desconocido para mí, nos hizo descubrirnos a través del correo. Aunque fue complicado, ya que, tus tiempos y los míos no eran los mismos.
Bueno sin conocernos difícil ponernos de acuerdo. Nos topamos, nos descubrimos de manera rápida e intempestiva, sabiendo por quien estábamos entrelazados, pero sin saber mas el uno del otro según mas adelante conversamos. Yo pensando que eras un perfecto desconocido, pero te conocía, más que mal alguna vez te había leído, la vida es muy extraña, teniéndote entre mis manos de manera diferente. En todo caso en ese contexto solo eran letras y un nombre, que nunca hubiera pensado en asociar. Después de un par de correos y unos encuentros rápidos y furtivos en MSN, no se como, menos cuando, pero me diste con confianza tus teléfonos, y poco a poco sabía más de ti.
La verdad fue poca la comunicación telefónica recuerdo, pero suficiente para generar en mí curiosidad por conocer a este perfecto desconocido. Recuerdo que tome la iniciativa y te invite un café, el cual tú rechazaste por tiempo. Como siempre me baje, suelo hacerlo pues me gusta que resulten las cosas como las pienso y espero, es malo lo se, pero buen es lo que hay.
Un día lunes, bendito lunes, nos dimos cita luego de nuestros deberes laborales, pero casi todo se trunca debido a tu trabajo, a lo que yo me oponía a posponer, pese a todo quedamos en juntarnos, a esas alturas difícil seria elegir un lugar para un café, pues eran más de las 11:00 de la noche, fueron varios los llamados que estabas retrasado, pero te quedaba poco..fue larga la espera pero valía la pena pensaba, se notaba sería un entretenido encuentro.
Ya pensando que tendría que recostarme, y teniendo intrigado a mi compañero de departamento, recibo un llamado y bueno eras tú estabas abajo del edificio, baje y un nervioso “Hola” salio de mi, me diste las disculpas del caso, y que bueno todo el retraso era la verdad por alguien que no querías dejar solo, explicaciones que agradecí. Esperamos nerviosamente un taxi, para luego decidir tomar camino hacia mi nuevo barrio, que debiera haber conocido, pero al parecer tu sabias mas de él que yo mismo, caminamos hacia Brasil y luego Cumming, tratando de decidir a que boliche entrábamos, pro lunes, y muchos ya a esas horas cerraban sus puertas, solo el motel seguía abierto jajaja pero no era el mejor lugar. Sí el conocernos era en buena onda, y para sociabilizar un rato y quien sabe hacer amistad con el tiempo, debo reconocer que vi a ese perfecto desconocido y quede marcando ocupado, no te había imaginado; blanco, pelo medio desordenado ondulado y castaño, ojos claros y medios achinados cuando ríes, en fin, caminando al fin encontramos en Brasil el refugio abierto uno era el Baires, pero la música estaba muy fuerte y no podríamos haber conversado así es que nos fuimos frente al local, tu cruzaste con mucha precaución la avenida yo salte por el bandejon, ya en el lugar insitu, nos pedimos unas cervezas, y una tabla, el lugar con cero estilo, pero la onda la poníamos los dos, y nuestra conversación fluyo demasiado bien, conversamos de todo, y vaya que conversamos, somos o muy sociables o muy buenos para hablar. Ya después de mucho conversar, saltaron a la luz coincidencias: buenas, malas en ese minuto no pensé, por ejemplo que yo conociera tus barrios de niño, segundo que teníamos personajes entre sí que al parecer se conocían, en fin luego de los tragos respectivos y que la noche avanzaba decidimos irnos, antes comentamos del lugar y su música de ahí salio el termino “metamorfolismo” por lo diverso y el continuo cambio de estilo en el local. Nos retiramos, a esas alturas el lugar estaba lleno y el único abierto en todo Brasil, cuando entramos no había mucho publico. Caminamos en dirección al departamento, te invite un te con canela, que me sonó como te con calena otro blue de la noche, en fin aceptaste, subimos y seguimos conversando en el living y con la taza entre las manos, hacia frío de repente a mí en lo personal hasta se me borro la película, de puro sueño y a tí también de hecho te pegue con la mano, y me regañaste me aproveche y me diste el gusto de hacerte un cariño en el pelo, te dejaste me acerque y te bese los labios, no me respondiste la verdad, solo fue un impulso y me dio hasta vergüenza, así es que rápidamente me levante y te dije ya vamos, tu te querías ir, yo sabia que entrabas tarde así es que te invite a quedar en mi dormitorio, yo dormiría en otro lugar, después de un rato aceptaste, te deje en el dormitorio, entre al baño y busque mi pijama, tu me pediste que no te dejara y te acompañara, fue entonces cuando todo cambio te abrace me abrazaste, y nos quedamos juntos ese bendito lunes.
Luego de ese día, la comunicación fue igual que antes, leve y sin mucho discurso, suelo ilusionarme, mas aún cuando no suelo tener encuentros con desconocidos menos quedarme con ellos, ese bendito lunes fue así pues realmente me sentí bien, disfrute cada momento y cada acción, pues bien recibí un correo electrónico que agradecía mi compañía, que a pesar de haber salido de todo lo convencional que inicialmente se pudo haber pensado, lo había pasado bien. La verdad yo solo sabia leer entre líneas, frases bonitas, como siempre idealista.
Pasó la semana, yo continuaba mi estado de hombre echando raíces, en lo que pensaba tenia frutos, aunque no estaba conforme con situaciones como la comunicación, la modernidad de ver las cosas y la intimidad, pero seguía forjando algo, no sin dejar de ilusionarme con ese sueño de un perfecto desconocido. Y el sábado recibí un llamado mientras andaba vitrineando muebles con el “ingeniero”, me comentaba que estaba en Santiago “yo1” y que iría a almorzar con el por mis barrios, si tenia tiempo para juntarnos y tomar un café, ese fin de semana me quedaba solo ya que se iban de viaje a viña, por tanto quedamos en conversar a ala tarde. Ah cabe destacar que “yo” es mi nombre y al parecer en su vida ya van 3, de estos nombres, es por eso lo de “yo1” su amigo del sur, “yo2” su amigo y desconocido pero referencia para mí, y yo.
Por la tarde, después de un día de lavado, de mirar muebles y estar chato con alguien que no habla, te llame y andabas aun de turista con tu amigo en Parque Arauco, quedamos en que pasarías por mí mas tarde. Fue así, y caminamos ya parecía costumbre por moneda en dirección a brasil, pasamos y me mencionaste el café barroco, yo el literario, al final fuimos a catedral con maturana, donde habían varios restoraunt´s yo elegí el Europub, nos quedamos en una de las primeras mesas, pedimos algo de comer y un café, te comente respecto a ingeniero, tal vez eso pienso te alejo, debo encontrar respuestas, en fin fue una conversación abierta por la música de Frank Sinatra, de quien tienes buenos recuerdos, me comentaste de tu gran amor, también idealista, eso me gustaba un mas. Se hizo tarde, bebimos incluso un sour, y nos fuimos tenias otro compromiso, de ahí que te puse el chico “socialite” me dijiste que no lo eras, pero si conocías muchas personas e intentabas pasar tiempo con cada quien. Caminamos y pensaste en tomar locomoción en catedral, pero la verdad como que no pasaba mucho, te llamaron ya iban por tí, me dejaste nos dejamos, como siempre yo por arriba en las nubes, te veía como alguien especial y ojala no como amigo, ese era mi sueño.

Transcurrida una semana confusa y muy complicado en el trabajo, creo te escribí un mail supe de ti por un mensaje en mi celular tú situación, y yo que solo dejaba pasar el tiempo, intentaba darle tiempo al tiempo, porque no quería despertar de ese sueño, pero cada vez que mi celular te identificaba la verdad algo ocurría en mi, el mensaje entre muchas cosas decía una palabra “cliché” que para mi lo dice todo, pero yo como siempre iluso no leía entre líneas, “eres una buena y linda persona”. La verdad me bajo aún mas ese famoso mensaje, pero no se porque me llamaste para saber si lo había recibido y es mas me lo vuelves a leer, a esas alturas no entendía estaba leyendo mal entrelineas, es que no es fácil entender a un humanista, y es por que a diferencia de los matemáticos que somos cuadrados se manejan en las palabras y frases hechas, tenemos mas encima mundos distintos, en fin solo fue un llamado para saber mi estado anímico y saludarme.
El fin de semana, como siempre salí para liberar tensiones y como este mundo es pequeño y existe lo que aprendí contigo y se llama “los seis grados de separación”, supe donde estabas, yo tan cerca de ti y lejos que ni siquiera podíamos juntarnos, tuve la mala ocurrencia de ebrio de enviarte un mensaje en la madrugada tu reacción nada, solo un mensaje de respuesta. No fue un buen fin de semana, en general terminaba el mes y ya no me sorprendía nada en ese mes, lo que había comenzado bien terminaba como pesadilla, en general no con mi sueño virtual.
El martes siguiente estaba en el gimnasio como es costumbre, me acompaño un amigo y me esperaría a la salida, acababa de subirme a la bicicleta y mi celular, un mensaje me invitabas a un cumpleaños, obvio me fui del gimnasio, te llame y acordamos en juntarnos. Estaba con una sonrisa de oreja a oreja, me duche y cambie, aunque creo me vestí muy perno para la ocasión, bueno primera vez que iba a un cumples de un perfecto desconocido, y de referencia estarían sus amigos, ¿serían cercanos? No lo sabía, en fin partimos conversamos acerca de la ultima semana, te comente que las cosas no iban bien con Ingeniero, y nada llegamos entramos todo acogedor unos amigos, amigas, buena música de fondo, durante la noche nos acompaño, Luís Miguel, Patricia Frías, Camilo Sesto, y termino con Miranda, todo muy “kitsh”, me sorprendió y me agrado algo y mucho no me dejaste de lado en toda la velada, eso habla bien de tí. Estaba contento, y me llamo a medianoche mi amigo desde Lima, yo creo le traspase la alegría al teléfono, culmino la noche y todos los comensales nos fuimos rumbo cada quien a sus hogares, te invite un té y asentiste negativamente, fue lo mejor creo te disculpaste aunque no había porque.
Sin saber era la última vez que te vería durante el mes, y me he recordado sobre lo que conversamos en ese pub del barrio Brasil, es verdad eso de "los seis grados de separación" y me he dado cuenta en menos de un mes, poniendo mayor atención a hechos o circunstancias en que conozco personas, y quien lo diría, nosotros sin saber nos conocíamos, por tus letras, por un amigo en común, y al final me hizo despertar de un sueño el no verte, tu mensaje en mi celular después del cumples de tu amigo, en que me dices estar con mucho trabajo y que me has leído y me escribirás, también frase “cliche” como “te llamamos” y para terminar por menos de “6 grados de separación” mi conocimiento virtual de un sueño que no fue solo mi imaginación excepto por ese bendito lunes que sin duda, solo fue un encuentro con una persona que solo en sueños hubiera estado.

Cosas aprendí, también reafirme posiciones respecto a experiencias vividas, como: jugarsela siempre por lo que se cree y quiere, el mundo es chico y estamos unidos solo por 6º de separación, y que los sueños aunque uno despierte se hacen realidad.

Datos sobre un gran tema, los seis grados de separación:

http://gsbwww.uchicago.edu/news/capideas/spanish/spr01stuart.pdf

http://6gradosdeseparacion.blogspot.com/

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